Desesperación por alquilar: no se consiguen propiedades y la gente ya reserva sin conocer su próxima casa

Por la escasa oferta hay listas de espera para acceder a un departamento o vivienda a un precio razonable.

18/06/2023 16:37Actualizado al 18/06/2023 16:37
En el marco de un mercado inmobiliario de escasas ofertas y precios disparatados, conseguir un departamento o una casa para alquilar se ha vuelto una gran odisea. Lo cierto es que con este panorama, cuando las inmobiliarias publican un alquiler a un valor razonable, la demanda y la desesperación se alinean y las propiedades duran pocas horas en el mercado.

María del Carmen Linkoniene, dueña de una inmobiliaria en la Ciudad de Buenos Aires, manifestó que está modalidad ocurre con más frecuencia y que “solo algunos alquileres en oferta llegan a ser publicados porque la mayoría es captada por las personas que aguardan en la extensa lista de espera”.

“Por lo general los precios de esos alquileres son de 90 o 75 mil pesos”, explicó. “Un alquiler barato no te dura nada, vos tenés la oferta y enseguida tenés al inquilino que te está esperando”, explicó a Clarín y agregó que las zonas que tienen esos valores están en Balvanera o San Cristobal.

No obstante, la mujer hace una advertencia en torno a las propiedades que son económicas: “Depende mucho de las unidades porque si bien son baratas la antigüedad es determinante. Más allá de la situación edilicia del lugar, la gente lo toma igual. Si no tenés donde vivir, es muy difícil”.

Son pocos los alquileres a buen precio y duran escaso tiempo en la oferta. Foto Emmanuel Fernández
Son pocos los alquileres a buen precio y duran escaso tiempo en la oferta. Foto Emmanuel Fernández

Al terminar, María considera que la realidad de los alquileres ha cambiado, “ahora un solo sueldo no alcanza para poder alquilar”. En la Ciudad de Buenos Aires, según un relevamiento del portal inmobiliario Zonaprop, los precios de las locaciones aumentaron en promedio el 10,8%, acumulando así la variación más alta desde que empezó esta medición en 2012 con un alza del 136,3%, por encima de la inflación.

Existe una gran disparidad entre los salarios y el precio de los alquileres. De acuerdo con el relevamiento del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (CESI), la mediana de los monoambientes ofertados en Capital Federal es de $ 92.500. Equiparándolo con el Salario Mínimo Vital y Móvil, que en mayo era de $ 84.512, llegó a cubrir apenas el 91,4% de un alquiler.

Por su parte, Alejandro Bennazar, presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina (CIA), consideró que “a nivel nacional, prácticamente, no hay oferta y las que están se van rápido".

"Hoy el mercado está muy complicado, nunca observamos algo así", indicó el titular de la CIA, que además señaló que "la mayoría de las propiedades que están dentro del precio no llegan a entrar al mercado, no duran muchos minutos o se alquilan de antemano".

Efecto Airbnb

Además, Bennazar consideró que lo que ocurre en la actualidad es que "la mayoría de los alquileres se van a la venta o a lo temporario". Sobre ese punto, el “efecto Airbnb” es cada vez más frecuente entre los propietarios que, de hecho, es 131% más caro que las propiedades que se ofrecen en el mercado tradicional.

En Argentina, la tendencia de la compra de departamentos chicos para transformarlos en alquileres temporarios, ofrecidos por Airbnb, crece entre quienes tienen dinero para invertir en inmuebles. Según datos de empresas asociadas a la Cámara Inmobiliaria Argentina, las ventas con ese destino subieron alrededor de un 15% respecto del año pasado.

Ignacio Mel, director de Mel Propiedades, remarcó: “Hoy los alquileres que están en precio y ofrecen condiciones acordes, se alquilan de inmediato y muchos no llegan a pasar un día publicados. Nos está sucediendo que nos llega la propiedad, la subimos a los buscadores e inmediatamente recibimos los llamados”, puntualizó.

“En muchos casos está sucediendo que el interesado ni siquiera coordina para ir a visitar la propiedad, la reserva solo informándose sobre las condiciones y viendo las fotos”, completó y aseguró que “la demanda es tan alta que produce ese efecto”.

Para terminar, Mel explicó que a medida que los contratos van venciendo hay propietarios que "no quieren renovar en las condiciones anteriores, o deciden no ofrecerlo más en alquiler, por lo que los inquilinos deben retirarse del inmueble, y buscar otra vivienda".

En ese sentido, agregó: "Eso genera la alta demanda y lleva a quien busca alquiler a tomar una decisión apresurada para asegurarse la propiedad”.

MG

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